Decir que el disco VIDA es algo de mucha gente puede parecer un tópico. Para mí ha sido algo que se ha dado con tanta naturalidad que no tengo otras palabras para expresarlo. Cada canción no es más que un reflejo de algo que en algún momento he vivido desde tan adentro, con tanta profundidad… que tengo la certeza de que no es mío, sino lo que la vida y las personas han reflejado en mí. Son las experiencias, lo que me llevo de cada persona con la que me he cruzado y lo que también dejo en cada una de ellas. Me siento sólo un pretexto para que este proyecto haya salido a la luz. Mucha gente buena ha puesto algo suyo aquí y es, por tanto, algo de muchos.

Y en este punto, os presento a dos personas espectaculares, con una humildad tremenda, y con una sensibilidad para mí fuera de lo común. Todos empezamos expectante este trabajo, sin saber dónde nos iba a llevar, pero ciertamente el paso de los meses nos ha ido embaucando y nos ha llevado a un sitio diferente del que partimos. Y bendito camino… Leyeron, escucharon, se sumergieron, bucearon y soñaron cada melodía y cada palabra. Y con ello me llevaron también a mí a otros escenarios que no había visitado antes.  Este impresionante trabajo de estas dos personas a las que tanto quiero, se ha convertido en ratos preciosos para compartir… tantos y tan bonitos que no encuentro el modo de explicarlo. Para eso están estas imágenes que acompañan y complementan las canciones, trazadas con pinceles, acuarelas, café, grafitos… y mucho cariño… entre tanto, tardes de conversación a distancia, entre sueños, risas y lágrimas. Este disco estaría incompleto sin Fausto y Guada.

Si ya estábamos cerca antes, esto nos ha unido más aún en otro sitio diferente en el que aún no habitábamos. «Qué pena que se acabe», les decía hace unos días. En absoluto. La vida es infinita. Si te resuena por dentro, al oír una canción, al contemplar esta obra de arte que han diseñado, es porque ya estaba antes de ser compuesto o dibujado.

No sabría cómo darles las gracias, de corazón, por el esfuerzo y la dedicación y el excelente trabajo. Pero, llegado el caso, y haciendo un esfuerzo, podría encontrar palabras. Para agradecer el encuentro y la ternura que han puesto, lo que de ellos me he llevado y lo que de mí han sacado para llevarse, la VIDA que hay escondida, como si fuera ese frasco en el que se guarda con tanto celo la flor, esa que ha llegado para quedarse entre nosotros… para eso no tengo más palabras. Ni tampoco creo que sean necesarias.

Disfruten de una auténtica obra de arte por cortesía de Fausto y Guada.

 

PUEDES DESCARGAR O VISUALIZAR LAS LETRAS EN LA SECCIÓN DE DESCARGAS

Descargas